El Papa se reúne con oficiales y soldados del “Arma dei Carabinieri” en la Plaza de San Pedro y, partiendo del ejemplo de Salvo D’Acquisto, aún hoy de gran actualidad, les dice que hagan “una sociedad más justa y humana”
Francesca Sabatinelli – Ciudad del Vaticano
En un tiempo “contaminado” por el individualismo y la intolerancia hacia los demás, por la exacerbación de tantas formas de violencia y de odio, en un tiempo en el que hay “necesidad de legalidad”, la misión de los carabineros hace que “la sociedad sea más justa y humana”. Francisco rindió homenaje a los “Carabinieri”, en una Plaza de San Pedro abarrotada de oficiales y militares, recibidos en audiencia en el 80 aniversario del sacrificio de Salvo D’Acquisto, el vicebrigadier Medalla de Oro al Valor Militar, asesinado por los alemanes el 23 de septiembre de 1943, que se sacrificó, recordó Francisco, “para salvar a rehenes inocentes capturados por las tropas nazis”. Un “colega” al que es bueno mirar, es la indicación del Papa, no para una “conmemoración estéril”, sino para “renovar hoy el compromiso en la Armada, al servicio del bien y de la verdad, al servicio de la sociedad”. El testimonio de Salvo D’Acquisto, representa hoy “una advertencia de gran actualidad” y “lanza un mensaje cargado de la fuerza del amor”.
“Mientras vivimos en un tiempo contaminado por el individualismo y la intolerancia hacia los demás, así como por la exacerbación de tantas formas de violencia y odio que vemos en nuestras ciudades, su testimonio entrega un mensaje cargado de la fuerza del amor. A ustedes, comprometidos diariamente al servicio de la justicia y de la legalidad -¡y cuánta necesidad de legalidad hay hoy! – quisiera decirles que todo ello encuentra su razón y su fin último en el amor. La justicia, en efecto, no tiende simplemente a imponer castigos a quien ha obrado mal, sino a restaurar a las personas en nombre del respeto y del bien común.”
Una sociedad más justa y humana
Los Carabinieri, es la indicación de Francisco, tienen una gran misión: la de hacer “la sociedad más justa y humana”.
“Por eso es hermoso que sean personas apasionadas, apasionadas como Salvo D’Acquisto; servidores del Estado y del bien común, que combatan la injusticia, defiendan a los más débiles, ofrezcan un sentido de protección a nuestras ciudades. El afecto de los italianos hacia ustedes atestigua que no son sólo palabras sino que, gracias al ejemplo de tantos de ustedes, ¡son una realidad!!
La lucha contra la mentalidad mafiosa
Sacrificio, compromiso, disciplina, voluntad y dedicación, estas son las características de un Carabinero, de quien está “inmerso en contextos difíciles”, continúa el Papa, llamado a “luchar contra todo tipo de ilegalidad, contra el crimen organizado y contra un sentido de impunidad a veces lamentablemente arraigado, contra la mentalidad mafiosa”. Francisco mira y agradece a los que llevan a cabo tareas de investigación, “para que se desenmascaren las mentiras”, a los que trabajan en “lugares de conflicto y en contextos internacionales”, que se convierten en artesanos de la paz acercándose a las poblaciones locales, y luego a todos los que realizan su servicio “en las calles de nuestras ciudades y en los rincones de nuestros barrios”.
“No se desanimen nunca, no cedan a la tentación de pensar que el mal es más fuerte, que lo peor no tiene fin y que su compromiso es inútil”. Mirando a Salvo D’Acquisto, déjense animar por la pasión del bien. Y, por favor, sigan mostrando cercanía a la gente, que siempre ha reconocido este bonito rasgo en ustedes”.