Este 31 de octubre nuestra Iglesia celebra la víspera de la Solemnidad de Todos los Santos. En esta solemnidad recordamos especialmente a aquellos hermanos nuestros que ya se encuentran en el cielo, gozando de la presencia de Dios y que no están inscritos en el catálogo oficial de los Santos.
La Oficina de Comunicación y Prensa de la Arquidiócesis de Santo Domingo, como medio articulador, se une a la iniciativa de varias parroquias a celebrar una Noche de Luz, mediante la Adoración Eucarística y motivando a conocer la vida de los Santos, considerando aquellos a los que se les tiene mayor devoción en el núcleo familiar. Han surgido varias iniciativas como: asistir a esta celebración vestidos de blanco y vistiendo a los niños del santo de su devoción.
ALGO DE HISTORIA
La celebración de una solemnidad en la Iglesia comienza con la caída del sol del día anterior. Esto se remonta a la tradición de los hebreos que concluían el día con la puesta del sol e inmediatamente comenzaba el día siguiente. Por lo que ya el viernes por la tarde se comenzaba a celebrar el día de Descanso.
En este sentido, la celebración de la Solemnidad de Todos los Santos, ubicada casi al final del año litúrgico, nos hace recordar la llamada universal a la santidad que tenemos todos los cristianos, la Comunión de los santos en la Iglesia que se vislumbra triunfante, peregrinante y purgante, siendo esta ultima realidad la que nos invita a orar por nuestros difuntos, celebración que tiene lugar el 02 de noviembre. Es por esto que el mes de noviembre está dedicado por completo a la oración por los difuntos y es posible lucrar indulgencia plenaria por ellos cada día bajo las condiciones habituales.
La Sociedad Occidental ha querido celebrar esta fiesta católica desvirtuando totalmente su verdadero significado, como ocurre con otras celebraciones, tal es el caso de la Navidad. La palabra Halloween, que todos conocemos, viene de la frase All Hollows Eve que significa Víspera de Todos los Santos. Nosotros como católicos, que conocemos el verdadero sentido de esta celebración, estamos llamados a recordar aquellos amigos de Jesús que con heroísmo vivieron sus vidas en la tierra y nos indican el camino hacia él que es la Luz del Mundo, que viene a iluminar a los que viven en tinieblas y en sombra de muerte, para guiar nuestros pasos por el camino de la paz (Lucas 1, 79).
Estaremos compartiendo las parroquias que estarán celebrando la Víspera de la solemnidad de Todos los Santos con una Noche de Luz.